Satz
181 :
Por lo visto, habiendo
fracasado mi caída en el pozo, no figuraba
en el demoníaco plan arrojarme a él.
Satz
182 :
Por tanto, estaba destinado,
y en este caso sin ninguna alternativa, a una
muerte distinta y más dulce ¡Mas
dulce!
Satz
183 :
En mi agonía, pensando
en el uso singular que yo hacía de esta
palabra, casi sonreí.
Satz
184 :
¿Para qué contar
las largas, las interminables horas de horror,
más que mortales, durante las que conté las
vibrantes oscilaciones del acero?
Satz
185 :
Pulgada a pulgada, línea
a línea, descendía gradualmente,
efectuando un descenso sólo apreciable
a intervalos, que eran para mí más
largos que siglos.
Satz
186 :
Y cada vez más,
cada vez más, seguía bajando,
bajando.
Satz
187 :
Pasaron días, tal
vez muchos días, antes que llegase a
balancearse lo suficientemente cerca de mí para
abanicarme con su aire acre.
Satz
188 :
Hería mi olfato
el olor de acero afilado.
Satz
189 :
Rogué al Cielo,
cansándolo con mis súplicas,
que hiciera descender más rápidamente
el acero.
Satz
190 :
Enloquecí, me volví frenético,
hice esfuerzos para incorporarme e ir al encuentro
de aquella espantosa y movible cimitarra.
Satz
191 :
Y luego, de pronto, se
apoderó de mí una gran calma
y permanecí tendido sonriendo a aquella
muerte brillante,como podría sonreír
un niño a un juguete precioso.
Satz
192 :
Transcurrió luego
un instante de perfecta insensibilidad. Fue
un intervalo muy corto.
Satz
193 :
Al volver a la vida no
me pareció que el péndulo hubiera
descendido una altura apreciable.
Satz
194 :
No obstante, es posible
que aquel tiempo hubiese sido larguísimo.
Yo sabía que existían seres infernales
que tomaban nota de mi desvanecimiento y que
a su capricho podían detener la vibración.
Satz
195 :
Al volver en mí,
sentí un malestar y una debilidad indecibles,
como resultado de una enorme inanición.
Satz
196 :
Aun entre aquellas angustias,
la naturaleza humana suplicaba el sustento.
Satz
197 :
Con un esfuerzo penoso,
extendí mi brazo izquierdo tan lejos
como mis ligaduras me lo permitían,
y me apoderé de un pequeño sobrante
que las ratas se habían dignado dejarme.
Satz
198 :
Al llevarme un pedazo
a los labios, un informe pensamiento de extraña
alegría, de esperanza, se alojó en
mi espíritu.
Satz
199 :
No obstante, ¿qué había
de común entre la esperanza y yo?
Satz 200 :
Repito que se trataba
de un pensamiento informe.